El concepto de los concursos de Spelling bee es muy sencillo: se trata de competiciones de ortografía, específicamente de deletreo en público. En cada ronda los participantes se enfrentan a palabras más complejas, hasta que se puede declarar un ganador.
En la práctica, como todos podemos imaginar, es un poco más complejo. En el español los problemas de deletreo se reducen a unas cuantas letras cuya sonoridad puede confundirse, por ejemplo, la “c” y la “s”, o la “b” con la “v”, además del uso de la “h”. Pero en el idioma inglés la situación se vuelve más complicada, aunque también mucho más divertida.
La dificultad principal del deletreo en inglés, y una de las diferencias sustanciales con nuestra lengua, es la poca relación entre la pronunciación y la escritura de la lengua inglesa, contrario a lo que pasa con la nuestra, cuya relación es casi absoluta. Esta característica es, además, uno de los principales motivos de los errores tanto en la ortografía como en la pronunciación del idioma.